De un tiempo a esta parte, han surgido muchas voces
en la comunidad médica que advierten de la inutilidad de muchos chequeos
médicos universales. Según sus críticos, las revisiones médicas de este tipo
provocan más alarmas injustificadas de las que sería deseable y, por el
contrario, son poco efectivas a la hora de detectar las verdaderas amenazas.
Pero, pese a que ningún médico duda de que la mejor
forma de atender a los pacientes son los diagnósticos personalizados,
elaborados por el médico de cabecera en función de unos síntomas por los cuales
se acude al médico, hay una serie de pruebas estandarizadas que son
imprescindibles a partir de cierta edad. Y, como es lógico, son distintas para
hombres y mujeres.
Estas son las pruebas que todos los hombres
deberían hacerse llegado el momento, para prevenir males mayores.
1. Diabetes
Cuándo
A partir de los 45, o antes si tienes algún factor
de riesgo, como exceso de peso, colesterol, alta presión arterial o
antecedentes familiares de la enfermedad.
Por qué
Si tu dieta no es todo lo buena que debiera, la
diabetes tipo 2 puede empezar a desarrollarse en cualquier momento. La buena
noticia es que, si se detecta a tiempo, una dieta de choque puede acabar con
ella y que la cosa no llegue a mayores. Si no, el resto de tu vida serás
dependiente de la insulina.
Cómo
Existen dos pruebas para medir la diabetes: una
medición de la glucosa en plasma (que debe realizarse tras un periodo de ayunas
de al menos 8 horas), que se ofrece en la Seguridad Social, y la prueba de
hemoglobina A1C, disponible en la cartera de servicios de muchas aseguradoras
privadas. El Ministerio de Salud recomienda pasar la prueba cada 3 años a
partir de los 45.
2. Índice de Masa Corporal
Cuándo
Es un indicador esencial de nuestra salud y todos
deberíamos conocerlo para saber si estamos por encima de las cifras
consideradas aceptables.
Por qué
El IMC es uno de los datos más importantes que
debemos conocer para hacernos una idea de nuestro estado de salud general. A
partir de ciertos niveles –desde el 25– es imprescindible que nos preocupemos
por reducirlo, haciendo dieta y ejercicio, si no queremos tener serios
problemas cardiovasculares o padecer diabetes. Aunque su cálculo es siempre
imperfecto (hay gente sana con un IMC considerado patológico, y gente enferma
con un IMC normal), sigue siendo un dato imprescindible para conocer nuestra
salud.
Cómo
El IMC es un indicador orientativo. Lo puede
calcular cualquier facultativo y suele ofrecerse en las revisiones médicas
generales, pero nada nos impide obtenerlo nosotros en nuestra propia casa. Se
calcula, sencillamente, dividiendo nuestro peso (en kilogramos) por nuestra
estatura (en metros), al cuadrado. Después, basta comprobar la clasificación de
la Organización Mundial de la Salud, para saber si padecemos sobrepeso,
obesidad o delgadez (de la que también deberíamos preocuparnos).
3. Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS)
Cuándo
Todo el mundo, a partir de los 15 años, aunque
deben tener especial atención todas las personas que hayan realizado sexo sin
protección o hayan consumido drogas por vía intravenosa.
Por qué
Aunque el impacto del sida ha disminuido en todo el
mundo occidental, no podemos dar por ganada la batalla. Todos podemos ser
víctima de esta u otras ETS, aunque pensemos que nuestros comportamientos
sexuales hayan sido siempre seguros. Hay que tener en cuenta, además, que se
puede contraer una enfermedad como el sida y no notar sus efectos hasta pasada
una década. Si se detecta a tiempo los retrovirales son mucho más efectivos.
Los adultos nacidos entre 1945 y 1965 también deben tener especial cuidado con
las hepatitis C, que podrían estar padeciendo sin siquiera darse cuenta.
Cómo
La mayoría de análisis de sangre (incluido el de la
revisión médica del trabajo) detectan estas enfermedades.
4. Presión arterial
Cuándo
La presión arterial es la prueba más sencilla del
mundo y se puede realizar en cualquier farmacia. A partir de los 18 es
conveniente someternos a ella al menos cada dos años, aunque cuando nos vamos
haciendo mayores, o si nuestros indicadores previos estaban al borde de lo aceptable,
es conveniente que nuestro médico nos la mire siempre que le visitemos.
Por qué
Al igual que el colesterol, la alta presión
arterial es síntoma de que algo no va bien en nuestro cuerpo y el sistema
cardiovascular está sufriendo.
Cómo
Aunque podemos medir nuestra presión arterial en
cualquier farmacia o consulta médica, si tenemos que controlarla de cerca, pues
nuestros niveles tienden a ser patológicos, las máquinas que lo miden,
conocidas como tensiómetros, no cuestan más de 30 euros.
5. Colesterol
Cuándo
Las autoridades sanitarias recomiendan que los
hombres midan sus niveles de colesterol cada cuatro años a partir de los 20,
aunque se debe aumentar la frecuencia (y realizar los controles antes) si
padeces diabetes, fumas o tienes una alta presión arterial. Aunque las mujeres
también pueden padecerlo la hipercolesteloremia es más frecuente en los
hombres.
Por qué
Los niveles altos de LDL, el colesterol “malo”, son
un gran factor de riesgo en lo que respecta a las enfermedades
cardiovasculares, y deben de mantenerse siempre ne niveles aceptables.
Cómo
El colesterol se mide con un análisis de sangre.
Aunque nos den la cifra de colesterol total en el examen médico del trabajo no
podemos fiarnos de ella, pues para saber si nuestro colesterol es realmente
patológico debemos conocer nuestros niveles de HDL (el colesterol “bueno”), LDL
y triglicéridos. Dependiendo de sus combinaciones tendremos que seguir una u
otra dieta.
6. Colonoscopia
Cuándo
A partir de los 50, cada 10 años. Antes y con más
frecuencia si se cuenta con antecedentes familiares de la enfermedad.
Por qué
El cáncer colorrectal es el tercero más común, pero
el segundo en mortalidad. Causa 639.000 muertes en el mundo cada año, y las
posibilidades de sufrirlo aumentan con la edad. Aunque la colonoscopia es una
prueba que resulta muy poco atractiva, y muchos tratan de evitar, es muy
importante pasar por ella a partir de los 50.
Cómo
La colonoscopia consiste en la introducción de una
pequeña cámara en el ano, para explorar el intestino en busca de pólipos u
otros indicativos de que algo no está como debiera. Es mucho menos doloroso de
lo que parece, entre otras cosas porque se anestesia a los pacientes. Más dura
es la preparación para la prueba: para vaciar el intestino deberás estar en
ayuno entre uno y tres días, bebiendo muchos líquidos y tomando laxantes. La
buena noticia es que no es necesario repetir la prueba hasta pasados 10 años.
7. Examen de cáncer de próstata
Cuándo
A partir de los 50, cada dos años. A partir de los
45 y con más frecuencia si se cuenta con antecedentes familiares de la
enfermedad.
Por qué
El cáncer de próstata es el segundo más común en
hombres, pero es de los menos peligrosos si se detecta a tiempo. El problema es
que se puede padecer durante años sin que los enfermos desarrollen ningún
síntoma, de ahí la importancia de someterse a exámenes en su busca a partir de
cierta edad.
Cómo
El método estándar para detectar el cáncer de
próstata es un análisis de sangre en el que se mide el antígeno prostático
específico (conocido como PSA por sus siglas en inglés), una sustancia cuyos
niveles aumentan cuando se está cursando un cáncer de este tipo. Se trata de una
prueba muy criticada, pues da pie a muchísimos falsos positivos: falla en el
35% de las ocasiones. Es por ello que, si aparecen niveles patológicos en un
examen rutinario, no debemos alarmarnos. Sólo un examen digital del recto
(realizado manualmente por un especialista) revelará si, en efecto, padecemos
el cáncer. Muchos médicos piden que se estandarice esta prueba en sustitución
del examen de PSA.