Seguidores del Blog:

Previsión del tiempo

lunes, 17 de septiembre de 2012

Reflexiones (III)


Un optimista siempre encuentra una oportunidad en cada calamidad, un pesimista siempre encuentra una calamidad en cada oportunidad (Wiston Churchill).

Cualquier persona que conozcas merece ser saludada con una sonrisa.

Una sonrisa es la forma más barata de mejorar tu apariencia.

No eres responsable de la cara que tienes, pero sí de la cara que pones.

Si albergas amargura en tu corazón la felicidad buscará otro sitio donde acomodarse.

Las oportunidades nunca se pierden, las que tú desperdicias alguien las encontrará.

Todos quieren vivir en la cumbre de la montaña, pero toda la diversión y la felicidad ocurren mientras estás escalándola.

La mejor manera de escapar de tu problema es solucionarlo.

Tenemos nuestros ojos enfrente porque es más importante ver hacia adelante que hacia atrás.

La vida es lo que viene, no lo que fue.

Es triste ignorar lo que se debe saber, pero es más triste saber lo que se debe ignorar.

Quien se aflige antes de tiempo se aflige más de lo necesario (Séneca.).

Los momentos más preciados de la vida no tienen ningún valor sino se comparten.

Si te empeñas en agradar a todos, acabarás por no agradar a nadie (Graf).

La vida es como un rollo de papel higiénico: mientras más se acerca a su final, más rápido se va.

Aceptemos que son las cosas pequeñas y cotidianas las que hacen la vida tan espectacular.

El ignorar las cosas no las cambia.

Las masas no siempre tienen la razón, tienen superioridad numérica, pero nada más.

A veces “la mayoría” sólo significa que todos los tontos están del mismo lado.

Cuando las cosas van mal, no vayas con ellas.

No es el más fuerte ni el más inteligente el que sobrevive, sino el más capaz de adaptarse a los cambios (Charles Darwin).

Recuerda: las decisiones son válidas en el momento en que las implementas; si no actúas, realmente no has decidido nada.

No tengo por qué asistir a todas las discusiones donde me invitan.

Sin lugar a dudas, el más grande benefactor de la humanidad es el que la hace reír.

Los pensamientos de un hombre son lo más importante de su vida… pero sus recuerdos son su vida misma.

Tomando en cuenta que la experiencia es la mejor de las maestras, no tiene nada de raro que sus lecciones sean tan caras. Sus honorarios son altos, es cierto, pero lo que ella enseña nunca se olvida.

En esta vida no hay éxitos ni fracasos, premios ni castigos, sólo consecuencias.

La vida es corta y el oficio de vivirla es tan difícil, que cuando uno comienza a aprenderlo…  ya hay que morirse.

Los grandes recuerdos, como las grandes obras, están hechos de pequeños detalles.

Los jóvenes no le dan mucha importancia a los recuerdos porque todavía no los tienen, aún no poseen ese valioso tesoro.

No hagas de tu cuerpo la tumba de tu alma (Pitágoras).