Gonzalo Rojas, poeta chileno nacido en Lebú, Arauco en 1917, falleció el pasado 25 de abril de 2011 después de una corta enfermedad. Estudió Derecho y Literatura en el Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile. Fue profesor de estética Literaria y Jefe del Departamento de Castellano en la Universidad de Concepción. Ejerció la docencia en Utah, EE.UU., Alemania y Venezuela. Organizó a partir de 1958 los famosos Congresos de Escritores en Concepción, reuniendo a lo más selecto de la literatura latinoamericana. Fué también diplomático en China y Cuba y perteneció al grupo surrealista reunido en torno a la Revista Mandrágora 1938-1943. Entre sus premios están: Premio Sociedad de Escritores de Chile por "Poesía Inédita" 1946, Premio Reina Sofía de poesía de España, Premio Octavio Paz de México y José Hernández de Argentina, Premio Nacional de Literatura de Chile en 1992 y Premio Cervantes de Literatura en 2003.
Sirva como homenaje este poema, donde se plasma el amor, la pasión irreductible:
Carta del suicida
Juro que esta mujer me ha partido los sesos,
Porque ella sale y entra como una bala loca,
y abre mis parietales y nunca cicatriza,
así sople el verano o el invierno,
así viva feliz sentado sobre el triunfo
y el estomago lleno, como un cóndor saciado,
así padezca el látigo del hambre, así me acueste
o me levante, y me hunda de cabeza en el día
como una piedra bajo la corriente cambiante,
así toque mi citara para engañarme, así
se habrá una puerta y entren diez mujeres desnudas,
marcadas sus espaldas con mi letra, y se arrojen
unas sobre otras hasta consumirse,
juro que ella perdura porque ella sale y entra
como una bala loca,
me sigue a donde voy y me sirve de hada,
me besa con lujuria
tratando de escaparse de la muerte,
y cuando caigo al sueño, se hospeda en mi columna
vertebral, y me grita pidiéndome socorro,
me arrebata a los cielos, como un cóndor sin madre
empollado en la muerte.
La miseria del hombre, 1940