El incremento de la explotación laboral y el recorte permanente de derechos y libertades para los trabajadores es una realidad cada día más dura en España. Las victimas propicias para la explotación laboral son las personas necesitadas de trabajo. Los factores que ahora mismo están acentuando la explotación de los trabajadores son la crisis económica y el pensamiento que tiene el trabajador de que debe estar agradecido por la "oportunidad de trabajo".
En el caso del inmigrante sin papeles le lleva a aceptar empleos que no cumplen ni las condiciones mínimas de seguridad, que se desarrollan en horarios extremos, en lugares insalubres, por los que se paga una miseria y bajo la constante amenaza de la denuncia por parte de sus empleadores. En este sentido, los explotadores se han podido aprovechar de su situación de vulnerabilidad, privando de todo derecho a los trabajadores. Y muchos lo tienen perfectamente calculado. Las inspecciones de trabajo son comunes en España, por eso, las personas que contratan inmigrantes en situación irregular “esconden” a los sin papeles, ellos nunca trabajan de cara al público. También suelen estar avisados de cuándo van a tener inspecciones en sus empresas.
La necesidad del inmigrante y la falta de escrúpulos de los explotadores, recrean una combinación peligrosa e injusta. Lo más habitual es que esta gente no cobre. Trabaja un tiempo, con promesas de un sueldo y luego, después de estar trabajando en condiciones infrahumanas no perciben un salario.
Lo que no saben muchos inmigrantes que trabajan cada día bajo estas condiciones es que la legislación española sí contempla la protección de sus derechos. De hecho, ellos pueden denunciar las situaciones de explotación e incluso formalizar su regularización por haberlo hecho, pero el miedo, la falta de información y de recursos se lo impiden.
Todos pensamos que la explotación laboral se produce más frecuentemente en trabajos para gente no cualificada, pero os contaré un caso que conozco personalmente. Tengo una amiga con su carrera de Derecho terminada, que ha estado trabajando en un despacho de abogados de prestigio, trabajando duro durante muchos meses. Ha estado llevando casos en el despacho, incluso estuvo de abogada en algún juicio y todo sin cobrar un euro. Un día decide hablar con su Jefe, prestigioso abogado en Asturias, le dice que cuándo va a regularizar su situación laboral y empezar a cobrar algún salario, (más que nada para dejar de pedir dinero a sus padres y para que sus pequeños ahorros no se le acaben...) ¿resultado? ahora está buscando trabajo y del tiempo que estuvo trabajando en el despacho no ha cobrado nada... como veréis sinvergüenzas hay en todos los sitios, incluso con corbata y toga, es de mencionar también que por ese despacho han pasado más chicas y todas han padecido la misma situación. Esta es una de las formas de explotación laboral, la que hacen estos "señores", los mismos que luego dicen al Gobierno que hay 4.910.200 personas en paro y ellos contratando mano de obra "barata"...