El volumen de datos que se crean cada día está en
franca expansión. Pero en términos de mantenimiento de estos datos para las
generaciones posteriores, la cosa necesariamente no ha mejorado desde los días
en que las cosas se cincelaban en dura piedra.
De hecho, la posibilidad de perder información
realmente puede haber aumentado desde esos días, con formatos que a la mínima
se rayan, se desmagnetizan o, por su tamaño, se pierden irremediablemente en
los bolsillos de los usuarios.
Así que tirando de cosas más bien pequeñas, Hitachi
anda inmerso en un nuevo formato que pueda soportar temperaturas extremas y
condiciones límite sin degradarse lo más mínimo, para que sirva de soporte de
los datos “incluso durante millones de años”.
La compañía ha presentado este lunes su formato de
almacenamiento de información digital sobre una especie de lajas de cristal de
cuarzo que almacena los datos en forma binaria mediante la creación de puntos
dentro de esta delgada lámina, que se puede leer con un microscopio óptico
ordinario.
El proceso funciona colocando pequeños puntos
llamados “voxels” en este vidrio, que cambian la forma en que la luz se mueve a
través de él. Estos voxels se pueden leer utilizando un descodificador óptico,
lo que permite al usuario escribir o borrar datos tantas veces como quiera.
Sería, precisamente, como grabar la información en
una piedra que resista prácticamente para siempre y que nos recuerda mucho al
sistema de almacenamiento de “cristales de memoria” que utilizaba Superman para
recordar las grabaciones milenarias de sus padres interestelares, esa especie
de astillas de cristal que tanto ponía en el reproductor cuando le asaltaba la
morriña en su palacio de hielo.
Salvando los paralelismos de ficción con el
superhéroe, el prototipo de dispositivo de almacenamiento presentado es de dos
centímetros cuadrados y apenas dos milímetros de grosor; y está hecho de vidrio
de cuarzo, un material altamente estable y resistente, usado para fabricar
vasos y otros instrumentos para uso en laboratorio. El chip, que es resistente
a muchos productos químicos y no se ve afectado por las ondas de radio, puede
exponerse directamente a las llamas a 1.000 grados centígrados durante al menos
dos horas sin que se dañe. También es resistente al agua, lo que significa que
podría sobrevivir a catástrofes naturales, como incendios o tsunamis.
Los investigadores de Hitachi creen que los datos
sobrevivirán independientemente de las condiciones extremas a las que se
someta, a menos que este vidrio extremadamente duro se rompa de un potente
martillazo.
El material cuenta actualmente con cuatro capas de
puntos, que pueden almacenar 40 megabytes por pulgada cuadrada, aproximadamente
la densidad de un CD de música. Pero los investigadores creen que añadir más capas
no debería ser un problema.
Hitachi no ha decidido cuándo pondrá el chip a la
venta, pero los investigadores afirman que podrían comenzar a probarlo con los
servicios de almacenamiento para agencias gubernamentales, museos y
organizaciones religiosas que deseen ver sus datos a salvo hasta del mismísimo
Apocalipsis. Siempre y cuando uno de los jinetes no venga con martillo en
ristre, claro.
Leído
en: http://blogs.lainformacion.com/futuretech/2012/09/24/hitachi-desvela-un-formato-de-almacenamiento-en-cristal-que-guarda-los-datos-para-siempre/