Una mujer muy sabia se despertó una mañana, se miró
al espejo y notó que tenía solamente tres cabellos en su cabeza. “Hmmm” pensó. “Creo que hoy me voy a hacer una
trenza”. Así lo hizo y pasó un día maravilloso.
Al siguiente día se despertó, se miró al espejo y
vio que tenía solamente dos cabellos en su cabeza. “Hmmm” dijo. “Creo que hoy me peinaré de raya en
medio”. Así lo hizo y pasó un día grandioso.
El siguiente día, cuando despertó, se miró al espejo
y notó que solamente le quedaba un cabello en su cabeza. “Bueno” se dijo. “Ahora me haré una cola de caballo”.
Así lo hizo, y tuvo un día muy, muy divertido.
A la mañana siguiente, cuando despertó, corrió al
espejo y enseguida notó que no le quedaba un solo cabello en la cabeza. “¡Qué Bien!”, exclamó. “¡Hoy no me tendré que
peinar!”.
Tu actitud es todo en la vida. Alégrate cada
mañana. Ríete de ti mismo. Acéptate. Sé bondadoso y amable con los demás. Sonríeles,
porque cada persona que te encuentres tiene sus problemas y tu sonrisa le
ayudará.
¡¡La
vida no es esperar a que la tormenta pase, ni es abrir el paraguas para que
todo resbale... la vida es aprender a bailar bajo la lluvia!!