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domingo, 30 de marzo de 2014

Los pobres de Montoro

Acaba de hacer Cáritas un informe sobre la pobreza en España que no se ajusta a la realidad. Lo ha denunciado el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en la rueda de prensa posterior al consejo de ministros de ayer. Resulta que Cáritas quiere “provocar debates” en ese sentido, asegura el ministro, con lo que esta organización humanitaria católica parece haber demostrado su clara filiación con los violentos. Como todo el mundo sabe, los violentos son esos señores perseguibles y encarcelables que se empeñan en no ver ni decir que España está en la senda del crecimiento, que hay brotes verdes inundando toda la primavera económica, y que Montoro tiene un parecido con Paul Newman que echa p´atrás.
Los violentos de Cáritas quieren hacernos creer que España es el segundo país de Europa con más pobreza infantil, solo por detrás de Rumanía, y hasta han elaborado un informe para propalar por el mundo tal falacia. Y su secretario general, ese Otegi católico llamado Jorge Nuño, se ha atrevido a afirmar que con la mitad de la pasta que va a destinar el Gobierno a rescatar las autopistas podríamos acabar con la pobreza en España.
Montoro ha dejado claro que esos datos de Cáritas están basados en “mediciones estadísticas” que “no se corresponden con la realidad”. Como todo el mundo sabe, la estadística es esa ciencia exacta que solo se corresponde con la realidad cuando lo dice Montoro. Los 700.000 hogares españoles que no ingresan un duro, por ejemplo, son una manipulación de Jorge Nuño, y a cuatro de cada cinco millones de españoles en situación de exclusión social severa los encuentras desde primera hora de la mañana en los bares bebiendo anís del mono y riéndose del Gobierno, lo que indica que son poco fiables para participar en estadística alguna.
Los pobres españoles estamos muy empeñados en reventar las mediciones estadísticas. Baste un ejemplo. Si uno hace una estadística con Luis Bárcenas y 49 pobres, resulta que cada español tiene en Suiza un millón de euros en dinero negro. Que es la verdad española que Montoro propone difundir a través de Cáritas y del INE. Cáritas, organización católica, tampoco ha entendido el concepto de gobernar como dios manda. O sea, de milagro. Con sobresueldos diferidos y tal. Y los niños españoles en situación de exclusión están jodidos porque no han sido lo suficientemente espabilados como para robar la hucha del Domund. Que es la Gürtel infantil.
Montoro ha puesto a los violentos de Cáritas en su sitio. Pena que la ley de partidos no contemple subyugar a organizaciones humanitarias católicas. Eso de meter a los pobres y a los niños en las estadísticas debería ser contemplado como delito de lesa humanidad. Sin embargo, Montoro se ha encontrado con un insuperable escollo a la hora de enfrentarse a Cáritas. El ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, adscrito fervorosamente al Opus Dei, se niega a enviar a las Unidades de Intervención Policial a que le extirpen un testículo a Jorge Nuño con un pelotazo de goma. En esto se da uno cuenta del error que cometió España al declararse constitucionalmente estado aconfesional.
El testículo y las estadísticas de Nuño atentan fehacientemente contra la marca España. La imagen que Cáritas está proyectando de nuestro país en el exterior no ayuda en absoluto a lograr que Mariano Rajoy ponga los pies encima de la mesa del despacho de Obama, que es el sueño que todos los españoles de bien, ricos y pobres, anhelamos. Dejémonos ya de demagogia y reconozcamos que los pobres españoles no son ni siquiera católicos. Y empecemos a exigirle a Cáritas un poco de patriotismo. Ayer tuiteó un tal Luis Hernández una frase que demuestra el daño que pueden hacer las estadísticas de Cáritas al pensamiento del español honrado: “Si a alguien le indigna más ver un contenedor ardiendo que una persona comiendo de él, tiene que revisar sus valores”. Este tipo de ideas es lo que Cáritas está alimentando con sus estadísticas falaces. Cuando el sueño erótico de todos nosotros es el de rescatar las autopistas con 4.000 millones y enterrar a nuestros cinco millones de pobres en sus cunetas. Que es que son muy pesados y dan mal ambiente en los bares.
 
Rosa y Espinas en Público.es

sábado, 29 de marzo de 2014

Detrás de mi sonrisa


Detrás de mí sonrisa, sé qué nombre está
no le olvido, por si algún día le pronuncio y viene.
Pensaba en las pecas de un pelirrojo
aquel que un mes me mato de ilusión
y al siguiente de pena.
 
Guardo en mi mente ese nombre,
le guardo en el bolsillo de mi abrigo
una historia verídica, no fue un sueño .
 
Aprieto tu nombre en mis labios
como si en tu nombre no se apretaran
las siete letras unas con otras para darle
significado a mi deseo.
 
Sonreíamos y nos mirábamos a los ojos
nos buscábamos en la mentira
fingía tristeza, ser feliz no estaba de moda
Como si a tu nombre no se atara mi vida
cada vez que te nombrara.

Luego... ocurrió que yo era yo
que mis brazos no eran suficientemente largos
para abrazar tu futuro.
Ahora no sobra espacio... faltas tú .

He vuelto a sonreír
sé que estas sin estar
que tus ausencias son presencias en la retaguardia.

Mi sonrisa no es abrir mucho la boca
si no cerrar muy poco los ojos.
Sonreír con todo el cuerpo
por esa felicidad de saberme observada por Ti.

Arquear las cejas y recordar aquel "mar"
aquella lluvia fina que emigraba de las nubes
testigos de aquellos besos.
Un paseo rodeados de azul y verde .

No me fui, ni te fuiste
entre nosotros la máxima despedida
siempre fue un hasta luego.
Y el luego no se hizo nunca
y el nunca no se hizo eterno... estamos.

Saberte tras mi espalda
hace que el tiempo no me duela
y se escapa la sonrisa de seguirte "pensando".
 
Tesy

Leído en: http://tesy-ellenguajedelasflores.blogspot.com.es/2013/12/detras-de-mi-sonrisa.html

viernes, 28 de marzo de 2014

¿Qué nos aburre?

El 49% de los españoles se aburre cuando ve la vuelta ciclista, según una encuesta realizada con motivo del Día Mundial del Sueño por la firma Agua de Sueño para conocer las cosas que nos incitan a dormir. Otras opciones mayoritariamente escogidas por los encuestados son hacer cola en un banco (49%), escuchar los discursos de los políticos (47%) y el discurso de Nochebuena del Rey (41%).
 
Además de las etapas de la Vuelta, hay otras situaciones que nos invitan a echar una cabezada. Empatada con el ciclismo, tener que aguantar la cola de un establecimiento es otra opción muy aburrida para el conjunto de los españoles. Las colas interminables en el banco, en la tienda de ropa preferida o en nuestro supermercado más cercano, nos parecen soporíferas.
 
Aguantar los discursos de ciertas personas también nos invita al sueño. Los discursos monótonos de la clase política actual aburren al 47% de los españoles y el tradicional discurso de Nochebuena del Rey hace que al 41% de los encuestados le entre el sueño antes de ponerse a celebrar la Navidad.
 
Por otro lado, el 27% cree que ir a misa no es una opción divertida para las mañanas de los domingos. Aguantar el sermón del cura de la parroquia crea somnolencia entre los que optan por entrar en una iglesia cuando se celebra un acto religioso.
 
El típico atasco mañanero es aburrido para el 23% de los encuestados, ya que tener que aguantar cada día el mismo tráfico a la misma hora provoca que nos entre el sueño en plena retención. Cuando llega el fin de semana, un 12% considera que la comida en casa de los suegros puede ser una buena previa para realizar la siesta.

LAS ACTIVIDADES QUE MÁS ABURREN A LOS ESPAÑOLES

  1. Ver una etapa de la Vuelta ciclista (49%)
  2. Hacer cola en un banco (49%)
  3. Escuchar los discursos de los políticos (47%)
  4. El discurso de Nochebuena del Rey (41%)
  5. Esperar en el médico (24%)
  6. Esperar en un atasco (23%)
  7. Comer en casa de los suegros (12%)
  8. Esperar el bus (8%)
  9. Una reunión con el jefe (7%)
  10. Escuchar a tu pareja al final del día (5%)

jueves, 27 de marzo de 2014

Casas de cartón

"Que triste se oye la lluvia
En los techos de cartón
Que triste vive mi gente
En las casas de cartón...
 
Viene bajando el obrero
Casi arrastrando los pasos
Por el peso del sufrir
Mira que mucho ha sufrí..
Mira que pesa el sufrir
 
Arriba deja la mujer preñada
Abajo está la ciudad
Y se pierde en su maraña
Hoy es lo mismo que ayer
En su vida sin mañana
 
Ahí cae la lluvia
Viene, viene el sufrimiento
Pero si la lluvia pasa
¿Cuándo pasa el sufrimiento?
¿Cuándo viene la esperanza?'
 
Niños color de mi tierra
Con sus mismas cicatrices
Millonarios de lombrices
Y por eso
Que tristes viven los niños
En las casas de cartón
Que alegres viven los perros
Casa del explotador
Usted no lo va a creer
Pero hay escuelas de perros
Y les dan educación
P'a que no muerdan los diarios
Pero el patrón!
Hace años muchos años
Que esta mordiendo al obrero
 
Que triste se oye la lluvia
En los techos de cartón
Que lejos pasa la esperanza
En las casas de cartón
Que triste se oye la lluvia
En los techos de cartón
Que triste se oye la lluvia
En los techos de cartón"
 

miércoles, 26 de marzo de 2014

Reflexión XXX: ¿Sufrir?

Este es un ensayo de Viktor Frankl, neurólogo, psiquiatra, sobreviviente del holocausto y el  fundador de la disciplina; que conocemos hoy como Logoterapia.

No eres Tú, soy Yo...  ¿Quién te hace sufrir? ¿Quién te rompe el corazón? ¿Quién te lastima? ¿Quién te roba la felicidad o te quita la tranquilidad? ¿Quién controla tu vida?... ¿Tus padres? ¿Tu pareja? ¿Un antiguo amor? ¿Tu suegra? ¿Tu jefe?...

Podrías armar toda una lista de sospechosos o culpables. Probablemente sea lo más fácil. De hecho sólo es cuestión de pensar un poco e ir nombrando a todas aquellas personas que no te han dado lo que te mereces, te han tratado mal o simplemente se han ido de tu vida, dejándote un profundo dolor que hasta el día de hoy no entiendes.

Pero ¿sabes? No necesitas buscar nombres. La respuesta es más sencilla de lo que parece, y es que nadie te hace sufrir, te rompe el corazón, te daña o te quita la paz. Nadie tiene la capacidad al menos que tú le permitas, le abras la puerta y le entregues el control de tu vida.

Llegar a pensar con ese nivel de conciencia puede ser un gran reto, pero no es tan complicado como parece. Se vuelve mucho más sencillo cuando comprendemos que lo que está en juego es nuestra propia felicidad. Y definitivamente el peor lugar para colocarla es en la mente del otro, en sus pensamientos, comentarios o decisiones.

Cada día estoy más convencido de que el hombre sufre no por lo que le pasa, sino por lo que interpreta. Muchas veces sufrimos por tratar de darle respuesta a preguntas que taladran nuestra mente como: ¿Por qué no me llamó? ¿No piensa buscarme? ¿Por qué no me dijo lo que yo quería escuchar? ¿Por qué hizo lo que más me molesta? ¿Por qué se me quedó viendo feo? y muchas otras que por razones de espacio voy a omitir.

No se sufre por la acción de la otra persona, sino por lo que sentimos, pensamos e interpretamos de lo que hizo, por consecuencia directa de haberle dado el control a alguien ajeno a nosotros.

Si lo quisieras ver de forma más gráfica, es como si nos estuviéramos haciendo vudú voluntariamente, clavándonos las agujas cada vez que un tercero hace o deja de hacer algo que nos incomoda. Lo más curioso e injusto del asunto es que la gran mayoría de las personas que nos "lastimaron", siguen sus vidas como si nada hubiera pasado; algunas inclusive ni se llegan a enterar de todo el teatro que estás viviendo en tu mente.

Un claro ejemplo de la enorme dependencia que podemos llegar a tener con otra persona es cuando hace algunos años alguien me dijo:

"Necesito que Enrique me diga que me quiere aunque yo sepa que es mentira. Sólo quiero escucharlo de su boca y que me visite de vez en cuando aunque yo sé que tiene otra familia; te lo prometo que ya con eso puedo ser feliz y me conformo, pero si no lo hace... siento que me muero".

¡Wow! Yo me quedé de a cuatro ¿Realmente ésa será la auténtica felicidad? ¿No será un martirio constante que alguien se la pase decidiendo nuestro estado de ánimo y bienestar? Querer obligar a otra persona a sentir lo que no siente... ¿no será un calvario voluntario para nosotros?

No podemos pasarnos la vida cediendo el poder a alguien más, porque terminamos dependiendo de elecciones de otros, convertidos en marionetas de sus pensamientos y acciones.

Las frases que normalmente se dicen los enamorados como: "Mi amor, me haces tan feliz", "Sin ti me muero", "No puedo pasar la vida sin ti", son completamente irreales y falsas. No porque esté en contra del amor, al contrario, me considero una persona bastante apasionada y romántica, sino porque realmente ninguna otra persona (hasta donde yo tengo entendido) tiene la capacidad de entrar en tu mente, modificar tus procesos bioquímicos y hacerte feliz o hacer que tu corazón deje de latir.

Definitivamente nadie puede decidir por nosotros. Nadie puede obligarnos a sentir o a hacer algo que no queremos, tenemos que vivir en libertad. No podemos estar donde no nos necesiten ni donde no quieran nuestra compañía. No podemos entregar el control de nuestra existencia, para que otros escriban nuestra historia. Tal vez tampoco podamos controlar lo que pasa, pero sí decidir cómo reaccionar e interpretar aquello que nos sucede.

La siguiente vez que pienses que alguien te lastima, te hace sufrir o controla tu vida, recuerda: No es él, no es ella... ERES TÚ quien lo permite y está en tus manos volver a recuperar el control.

"Al hombre se le puede arrebatar todo, salvo una cosa: La última de las libertades humanas-la elección de la actitud personal que debe adoptar frente al destino- para decidir su propio camino".

martes, 25 de marzo de 2014

Poema de un perro

Yo soy el que te espera...
Tu coche tiene un sonido especial y puedo reconocerlo entre mil.
Tus pasos tienen un timbre mágico, son música para mí.
Tu voz es el mayor signo de mi tiempo feliz, y a veces no es necesario oírla: oigo tu tristeza.
Si veo tu alegría, me hace feliz!
No sé lo que es olor bueno o malo, solo sé que tu aroma es el mejor.
Algunas presencias me gustan. Otras, no tanto.
Pero tu presencia es lo que mueve mis sentidos.
Tu despierto, me despiertas.
Tu durmiendo eres mi Dios, reposando en casa y yo cuidando tu sueño.
Tu mirada es un rayo de luz, cuando me doy cuenta de tu despertar...
Sus manos sobre mí, tienen la ligereza de la paz.
Y cuando Tú sales, todo está vacío otra vez...
Y vuelvo a esperarte siempre y siempre...
Por el sonido de tu coche;
Por tus pasos;
Por tu voz;
Por tu estado siempre inconstante del humor;
Por tu olor;
Por tu reposo bajo mi vigilia;
Por tus ojos;
Por tus manos.
Y soy feliz así.
Yo soy el que te espera:
¡Soy tu perro!

lunes, 24 de marzo de 2014

Fue emocionante

Había una barbaridad de gente y fue emocionante. Se lo digo yo, que lo vi. Desde luego bastante más que cuando La Roja ganó el Campeonato del mundo, y me atrevería a decir que tanta como cuando se protestó contra la guerra de Irak, según vi también en aquella ocasión. Y mucha más que la que anualmente organizan en defensa de la familia o contra el aborto. Les confieso una cosa: yo no esperaba ni la cuarta parte de manifestantes.
Aunque no debe medirse en función de la asistencia. Lo relevante es que al final los asistentes, se notaba, tenían la sensación de que no había sido tiempo perdido. Naturalmente que el Gobierno no va a dimitir, como se pedía. Incluso le traerá al pairo. O eso dirán. Pero en el aire quedó que la toma de conciencia era un hecho y que esto continuará. Ésa es la razón por la que ha sido un éxito clamoroso. Y lo más extraordinario: no hace falta ser brujo o vidente para saber que, a pesar de la escasa cobertura mediática, la repercusión en todo el país habrá sido importantísima y de apoyo, por mucho que las fuerzas conservadoras traten de negarlo. No hubo, durante el tiempo que yo permanecí, ni un altercado, ni una voz disonante o directamente agresiva. Fue una explosión controlada de sinceridad. Fue honesta. Fue ejemplar. Fue educada, pero firme. Repulsiva ausencia del PSOE. Elogiable presencia de IU.
Certificadora de que España no está muerta, prometedora de unidades de acción, con las ideas claras y concisas, sabiendo que desde hoy se tiene menos miedo. Por primera vez los estribillos coreados no fueron tópicos ni ridículos. No hubo batucadas, o yo no las vi. Lo único defectuoso, para mí, la agotadora, innecesaria y constante repetición de ‘compañeros y compañeras. Trabajadores y trabajadoras, …….’, así como el temor tan extendido a pronunciar el nombre de España y sustituirlo por el Estado Español. Yo, que soy un chinche.
Quedó claro que se dibujó un proyecto de futuro, aún inconcreto. No se solicitaron venganzas sino sustituciones (salvo prisión para los banqueros), esperanzas ciertas, sin enfrentamientos civiles, con la fuerza de la palabra y la protesta. Fue emocionante. Algo va a cambiar en España. No es una crisis, es una estafa, queremos trabajar, la lucha sigue cueste lo que cueste, arriba, arriba, arriba, arriba, arriba, todos a luchar, porque somos seis millones y queremos trabajar, que se metan por el culo la reforma laboral.
El filósofo Descartes cambiaría hoy su celebérrimo ‘Pienso, luego existo’ por ‘Estoy, luego existo, la apoyo desde la distancia, luego estoy y luego existo’. Fue un éxito clamoroso y emocionante. Háganme caso. Yo lo vi.
 
Momentos más tarde, y ya fuera de la manifestación, un grupo de jóvenes incontrolados provocó incidentes. Reniego absolutamente de ellos, por no acordarme de la leche que les han dado. Es intolerable y estéril. Solo contribuye a desacreditar la manifestación. Debería aclararse quiénes son; los organizadores de la marcha tendrían que hacerlo, y asumirlo o repudiarlos frontalmente. Yo hasta llego a pensar que lo hacen por gamberrismo y estúpida diversión. Mataron la emoción. ¡Qué machos!
 
Puntadas sin hilo en publico.es

domingo, 23 de marzo de 2014

Reflexión XXIX: ¿Quién lo sabe?

Una historia china habla de un anciano labrador que tenía un caballo para cultivar sus campos. Un día el caballo escapó a las montañas. Cuando los vecinos del anciano labrador se acercaron para condolerse de él y lamentar su desgracia, el labrador les replicó:
 
- ¿Mala suerte? ¿Buena suerte? ¿Quién lo sabe?
 
Una semana después el caballo volvió de las montañas trayendo consigo una manada de caballos salvajes. Entonces los vecinos felicitaron al labrador por su buena suerte. Este les respondió:
 
- ¿Mala suerte? ¿Buena suerte? ¿Quién lo sabe?
 
Cuando el hijo del labrador intentó domar uno de los caballos salvajes, fue desmontado y se rompió una pierna. Todo el mundo consideró esto como una desgracia. No así el labrador, quien se limitó a decir:
 
- ¿Mala suerte? ¿Buena suerte? ¿Quién lo sabe?
 
Unas semanas más tarde el ejército entro en el poblado y fueron reclutados todos los jóvenes que se encontraban en buenas condiciones. Cuando vieron al hijo del labrador con la pierna rota, lo dejaron tranquilo.
 
- ¿Había sido buena suerte? ¿Mala suerte?... ¿Quién lo sabe?

sábado, 22 de marzo de 2014

35 cosas que lamentarás cuando seas viejo




Tarde o temprano vendrán los tiempos cuando no puedas hacer muchas cosas. Cuando algunas otras se volverán obsoletas o imposibles de realizar. Pero siempre habrá que recordar que mientras seas joven, la vida debe adquirir un sentido, un propósito. Y para llegar a ello se necesita ser proactivo, para no lamentar cosas que no hiciste o dejaste de hacer. Siempre se puede ser mejor. Aquí una lista de las cosas que probablemente lamentarás cuando seas más grande: 
 
1. No haber viajado cuando tuviste la oportunidad. Viajar es cada vez más difícil a medida que envejeces, pues tener una familia de 3 o más personas resulta más complicado que sostenerte a ti solo.
 
2. No haber aprendido otro lenguaje. Te arrepentirás cuando recuerdes que pasaste más de 4 años aprendiendo inglés en la escuela y no recuerdas nada.

 

3. Permanecer en una mala relación. Recuerda que “si decides estar en una relación infeliz, has decidido ser infeliz”. Créeme, nadie que haya salido de una mala relación en el pasado, ha volteado sin decir que hubieran deseado salirse antes.
 
4. Olvidar ponerte bloqueador solar. Arrugas, lunares, cáncer de piel son algunos de los padecimientos que pueden ser evitados si te cuidas.
 
5. Perderte la oportunidad de ir a conciertos de tus cantantes favoritos. 
 
6. Tener miedo a hacer cosas. Siempre que mires al pasado te dirás: “¿Por qué le tenía tanto miedo a eso?
 
7. No poner “hacer ejercicio” como una prioridad. Muchísimas personas alcanzarán la plenitud física de su vida acostados en un sillón. Cuando llegues a los 40, 50 y más, lamentarás haberte quedado sin hacer nada en lugar de haberte cuidado un poquito.
 
8. Dejarte definir por roles de género. No hay nada más triste que escucharte decir: “es que en ese entonces esas cosas no se hacías así”. Atrévete a cambiar los paradigmas.
 
9. No renunciar al trabajo que odias. Ok, entendemos que hay que pagar los recibos, pero si no tienes un plan para mejorar, podrías despertar 40 años después viviendo en un infierno laboral.
 
10. No haberte esforzado más en la escuela. No es que las calificaciones te hagan más valioso, pero algún día por alguna circunstancia te dirás que habrías deseado poner más atención en clase.
 
11. No darte cuenta lo guapo/guapa que eres. Muchos de nosotros pasamos mucho tiempo lamentándonos por no ser tan guapos y gastamos fortunas en mejorar algo que no nos parece. En realidad, somos bellos todo el tiempo.
 
12. Tener miedo de decir “TE AMO”. Cuando seas grande, verás que aunque tu amor no fue correspondido, siempre habrás querido expresar tus sentimientos.
 
13. No escuchar los consejos de tus padres. Lo sabemos, cuando eres joven no los quieres ni escuchar, pero créenos, cuando crezcas, desearás tan siquiera poder escuchar su voz, más aún un consejo. Y lo mejor es que todo lo que te dijeron era cierto.
 
14. Darle mucha importancia a lo que la gente piensa de ti. Te lo juro que en 20 años ni te acordarás de lo que aquella gente decía sobre ti y que tanto te importaba.
 
15. Apoyar el sueño de otras personas por encima de los tuyos. Si, ayudar a otros es bueno, siempre y cuando te des también el tiempo y espacio para brillar por ti mismo/a y realizar tus propios sueños.
 
16. Guardar rencor o resentimiento por alguien. Eso significa dejar que alguien viva en tu cabeza sin pagar renta. No vale la pena. ¿Cuál es el punto de recordar y recordar el daño que te han hecho? Déjalo ir.
 
17. No defenderte. La gente grande no deja que nadie les haga algo que no quieren, tu tampoco deberías.
 
18. No haber hecho una actividad como voluntario. Créeme, ayudar a alguien voluntariamente a hacer su vida más placentera, es algo que jamás lamentarás. Se siente increíble.
 
19. No cuidar tus dientes. Cepíllate, usa hilo dental, consulta a tu dentista regularmente. Cuando seas grande y te falten 3, 4 o más dientes, habrás deseado cuidarlos más.
 
20. No preguntarles cosas de la vida a tus abuelos antes de perderlos. Ellos ya han pasado por donde tú vas caminando y son una fuente inmensa de sabiduría. No pierdas la oportunidad de quererlos antes de que se vayan.
 
21. Trabajar en demasía. Nadie que vaya a morir ha deseado haber trabajado más o haber pasado más tiempo en la oficina. Por el contrario, desearon haber pasado más tiempo con su familia, amigos, pasatiempos.
 
22. No saber cocinar por lo menos un platillo que te guste. Aprende a cocinar, tú mismo te lo agradecerás.
 
23. No detenerte para apreciar el momento. Sí, lo sabemos, los jóvenes siempre son muy activos, pero detenerte y admirar a tu alrededor es algo bueno, hazlo.
 
24. No terminar lo que empiezas. 
 
25. Dejar definirte a ti mismo por expectativas culturales. Nunca dejes que te digan: “nosotros no hacemos eso”.
 
26. No dejar a tus amigos que hagan su propia vida. Las amistades crecen por separado. Cada quien tiene su vida y debe hacer lo que considere mejor para ellos. No dejarlos realizarse es causa de problemas y tristeza. No quieres eso.
 
27. No jugar más con tus hijos. Cuando seas más grande, verás cómo tu hijo pasó de “Papi porfa vamos a jugar” al “Vete de mi cuarto papá”.
 
28. No tomar riesgos, especialmente en el amor. Saber que te atreviste a declarar tu amor a alguien, incluso si fue el más grande fiasco de tu vida, será bien visto por ti mismo cuando eres viejo. Aplica para las cosas de la vida cotidiana. Al final lo recordarás con una risa.
 
29. No darte el tiempo para hacer contactos. Siempre los vas a necesitar, siempre. Así que mejor comienza a hacerlos.
 
30. Preocuparte demasiado por todo. Si las cosas tienen solución ¿para qué te preocupas?, y si no tienen solución, ¿para qué te preocupas?
 
31. Hacer más drama del necesario. ¿Para qué? Nadie lo necesita. 
 
32. No pasar más tiempo con tus seres queridos. El tiempo que pasamos con las personas que amamos es limitado y pronto se acabará. Hazlo valer y aprovéchalo al máximo.
 
33. Nunca haber cantado o hablado frente a una audiencia. Sí, es muy difícil, suena descabellado. Pero atreverte te dará un empujón de autoestima increíble. Tú puedes hacerlo, aunque creas lo contrario. Te llevarás una grata sorpresa.
 
34. No haber hecho el amor más veces con tu pareja. El sexo es el acto supremo de felicidad y éxtasis. Más cuando se hace con la pareja que amas. Desafortunadamente tiene una fecha de expiración. Lamentarás no haberlo hecho más seguido.
 
35. No haber sido agradecido a tiempo. Es difícil verlo al inicio, pero eventualmente es más claro que cada momento en este mundo, desde el más mundano hasta el más increíble, es un regalo que se nos ha dado y somos increíblemente suertudos de haberlo recibido.

Leído en; http://elartedesabervivir.com/35-cosas-que-lamentaras-cuando-seas-viejo/

viernes, 21 de marzo de 2014

La sabiduría de Mafalda

“Al mundo le gustan los perros, y hasta el día de hoy nadie sabe decir guau” Pocas personalidades han sido más inquietas, críticas y cautivadoras que la de esta niña argentina creada por el gran Quino. Pero ¿qué la ha hecho tan especial como para llegar a cumplir medio siglo sin haber envejecido ni un ápice? Imaginamos que la fuerza de su humanidad y su inconformismo han permitido que se conservara con el mismo encanto que antaño. Porque las voces sinceras no se las lleva el viento, porque la rebeldía nunca pierde sus ganas por cambiar el mundo…
 
“No es cierto que todo tiempo pasado fue mejor, lo que pasaba era que los que estaban peor todavía no se habían dado cuenta”.
 
Mafalda es una niña argentina de clase media, curiosa y contestona. Una personita rebelde y con consciencia que, a pesar de representar el idealismo y la visión utópica, no se inclina jamás por una crítica destructiva donde se enfatice el anarquismo. Su lucha tiene finalidad y aspira a ser parte de ese cambio. Le encantaría poder estudiar idiomas para trabajar en Naciones Unidas y así, conseguir un mundo mejor y más humano. Para ella, su lucha, tiene una aspiración sencilla: la paz y la harmonía de un loco mundo que “no hay por dónde cogerlo”.
 
Mafalda es generosa y patriótica. Pero su patriotismo no radica únicamente en su querida Argentina, nuestra niña brillante piensa en todos y en todo. Uno de sus mayores problemas es sin duda su tamaño… es demasiado pequeña aún para generar cambios y mover mundos, pero desde su juventud y precocidad consigue empujar conciencias, despertar mentes y abrir fronteras. Y una de las mejores formas de iniciar esa lucha es “empujando a sus padres”, habitualmente pasivos y algo conformistas… Odia la injusticia, las armas nucleares, el racismo y los incomprensibles convencionalismos de los adultos.Pero si hay una cosa que odia por encima de todo… es la sopa.
 
¿QUÉ PODEMOS APRENDER DE MAFALDA? ¿No será acaso que esta vida moderna está teniendo más de moderna que de vida? El legado que nos deja esta niña bajita y de espeso flequillo es un despertar a la conciencia. No importa que la Mafalda de entonces naciera en los convulsos años 60. Los años se suceden dejándonos el mismo sin sabor, el mismo vacío y la misma incomprensión. Si la mascota de Mafalda era una tortuga a la que llamaba “burocracia” por su lentitud para avanzar, parece que son pocas las cosas que han mejorado desde entonces… Quino nos dejó quizá en sus tiras un arquetipo social del inconformismo que todos deberíamos desarrollar. Adquirir una visión crítica sobre las cosas es un sencillo modo de revalorar nuestra realidad para aspirar a algo mejor. Pero sin egoísmo. Porque la Mafalda de entonces sigue viviendo ahora, y vivirá mientras existan injusticias en cualquier parte del mundo. La incompetencia social existirá siempre, al igual que las injusticias y la maldad. Pero en ocasiones, basta una pequeña voz para sacarnos de nuestra de nuestra pasividad, para cuestionar a través de insistentes preguntas ese sistema inamovible que a veces, ni si quiera percibimos. Mafalda representa nuestra aspiración al idealismo, con una sombra de triste pesimismo pero con la fuerza suficiente como para cambiar el mundo…
 

jueves, 20 de marzo de 2014

Extravagantes y pintorescos jueces

pedraz
Ahora resulta que investigar un asesinato es extravagante y pintoresco. Lo ha dicho el portavoz del Grupo Popular en el Congreso. A Alfonso Alonso, tan vasco y tan pizpireto él, le parece “extravagante” la negativa del juez Santiago Pedraz a cerrar la investigación sobre el asesinato del cámara español José Couso en Irak, asesinato grabado con vídeo y audio, y cometido por condecorados militares estadounidenses con ganas de zumbarle a la prensa en su hotel con un cañón que tenían. Y le resulta “pintoresco”, al mismo pizpireto y vasco derechista Alfonso Alonso, que el ex juez Baltasar Garzón haya avisado a los parlamentarios populares de que pueden haber cometido un delito con eso de votar contra la justicia universal. Lo de votar contra la justicia universal, tal cual ha hecho nuestro partido de gobierno, ya suena bastante asquerosito. Porque uno tiene entendido que la justicia, o es universal, o no es justicia. Y a lo mejor Garzón lleva razón, y estos políticos que toman decisiones sobre cómo y dónde administrar justicia se están saltando la división de poderes de Montesquieu, y el artículo 506 de nuestro Código Penal invita a pasar tres años en la cárcel a “aquellas autoridades que dicten disposiciones generales para privar derechos y en ámbitos que no son de su competencia”. O sea, a estos.
 
Cuando los jueces dictan sentencias extravagantes o pintorescas hay que empezar a desconfiar de la Justicia. Así que Alfonso Alonso se ve de repente en la obligación moral y cívica de retirarle la toga al “extravagante” Santiago Pedraz, de demostrar que no está preparado para ser juez, de que es un inútil. Si un representante político califica de “extravagante” una decisión judicial tiene la obligación de tomar medidas. Como representante del pueblo, ha de asumir la responsabilidad defender al pueblo de las decisiones de este juez “extravagante” y apartarlo de la carrera judicial. Como se apartó de las urnas a partidos peligrosos (peligrosos a dedo) por aquella perversa ley de partidos que nos cosimos a la medida aprovechando que la Justicia es ciega. Hoy Alfonso Alonso ha hecho pública su obligación, como representante del pueblo, de defender al pueblo de un juez “extravagante”. Es lo que tiene saltarse la división de poderes. Si Alfonso Alonso no arremete ahora políticamente contra Pedraz hasta apartarlo de la carrera judicial, habrá demostrado que solo es un bocas incapaz de entender a Montesquieu, que al ser francés es un filósofo harto fácil. Y un tío que no entiende a Montesquieu no puede ser portavoz del muy docto Grupo Popular en el Congreso.
 
Yo creo que ya ha pasado el tiempo en que las palabras al aire de los políticos deban de ser perdonadas. No debemos dejar impunes ni el “que se jodan” ni el elegante calificativo de “extravagante” aplicado a un juez. Por muy iletrados que sean, los políticos se tienen que hacer responsables, muy responsables, de sus palabras.
 
Para Alfonso Alonso es “extravagante” que Pedraz insista en investigar el asesinato del periodista Couso por parte de fehacientes militares estadounidenses. Se puede entonces admitir que Josu Ternera califique de “extravagantes” las intenciones de Alfonso Alonso de que los presos etarras cumplan sus penas íntegras, o así.
A veces me preocupa más la corrupción semántica que la político/banquera, aquí en España. Debe ser que soy un tío extravagante y quizá hasta pintoresco.
 
Rosa y Espinas en Publico.es

miércoles, 19 de marzo de 2014

La barbarie española

Dice Ada Colau que en España se está normalizando la barbarie de los desahucios. Lleva razón, pero no se entiende por qué lo reduce al mundo crudelísimo de las hipotecas.
 
Con gran acierto, el comentarista zizero lo amplía a muchos otros campos y sostiene que la barbarie ya campa con los millones de parados existentes, con los cientos de miles de personas sin ingresos, con las pensiones de miseria (que aún quieren rebajar y privatizar), con la creación de puestos de trabajo miserables, los recortes a las personas dependientes, en la Enseñanza, en los repagos de medicinas y Sanidad, el aumento de impuestos, la disminución de atenciones sociales, una Ley Laboral esclavista, el proyecto de ley del aborto, y muchos políticos y empresarios mentirosos y txorizos. Lleva tanta razón o más que Ada Colau en lo suyo, pero también se queda corto: la barbarie se ha instalado en España en todo lugar y actividad bajo suaves y disimuladas formas democráticas.
 
Los españoles no tenemos piedad de los oros españoles, es mentira que seamos voluntariamente solidarios, somos la reedición moderna del ‘ande yo caliente y jódase (ríase) la gente’. Esta barbarie sibilina que nos invade es mucho más artera y dañina que la tradicional de la pura violencia. Es la explotación del hombre por el hombre y de la mujer por el hombre de modo más cáustico y obsceno. La democracia se ha convertido en barbarie a las órdenes del capitalismo más duro y de la política más cobarde. Y lo peor es que lo aceptamos, nos hemos acostumbrado. Pelotas de goma, corrupciones en metástasis, desigualdades sociales y económicas máximas fraude a gogó, anunciada reforma fiscal ominosa, juicios eternos, tribunales adaptados, Parlamento de sumisos aplaudidores, enseñanzas separadoras, fanatismos religiosos, irresponsabilidad política, mentiras como norma, voz del pueblo acallada, monarquía caduca, medios de comunicación prostituidos, la frivolidad como esencia del buen español. Esta barbarie lo dejará todo arrasado con la vaselina de la democracia violada. ¿No será que en el fondo todos somos de derechas? ¿Nos redimirán las Marchas de la Dignidad?
 
Puntada sin hilo en Publico.es
 

martes, 18 de marzo de 2014

Nuevos tipos de relaciones de pareja

“¿Es que acaso no podemos permitirnos relajar la cláusula de exclusividad de 24 horas, 7 días a la semana, de nuestros contratos de compromiso?” Esta es la pregunta que la siempre polémica periodista y presentadora Helen Croydon se hace en un artículo publicado esta misma semana en The Independent y que sirve para resumir su último trabajo, Que le den al cuento de hadas: la guía de una chica moderna sobre el sexo y el amor (John Blake Publishing Ltd.), publicado a principios de este mes en Reino Unido.
 
La tesis del volumen es muy directa: vivir juntos, casarse y tener dos niños ya hace mucho tiempo que no tiene por qué ser la única manera posible de realización personal y vital y, de hecho, ni siquiera es lo que mejor encaja con el ritmo que nuestra sociedad imprime. Croydon suele contar cómo, cada vez que asegura que no tiene ningún problema en pasar su vida sin marido e hijos, le responden que si desea morir sola. Pero, como afirma, hoy en día es casi imposible que tal cosa ocurra gracias a la conectividad de las redes sociales.
 
El problema es, en todo caso, la concepción que del amor tenemos hoy en día y que tan sólo tiene un par de siglos de antigüedad. Croydon recurre a una referencia de Elizabeth Gilbert, autora de Come, reza, ama, para recordar que “siempre que una cultura da su espalda a los matrimonios acordados a favor del matrimonio por amor, las tasas de divorcio se disparan”. ¿Por qué? Porque, como explica la autora, pedimos demasiado a nuestras parejas.
 
Hasta el siglo XVIII, el matrimonio tenía funcionalidades muy concretas. Mezclar linajes y establecer importantes relaciones con otras familias determinaban la mayor parte de los matrimonios, hasta que durante el siglo XIX, después de las profundas transformaciones que la Revolución Industrial comenzó a efectuar en la sociedad occidental, el individuo podía servirse del matrimonio como una forma de realización. Y ahí, afirma Croydon, comenzaron los problemas.
 
La autora da fe del comportamiento de sus amigos una vez se comprometen con otra persona. Tienen que estar pronto en casa (“¿qué pasa, sus parejas tienen miedo a la oscuridad?”), discuten continuamente por llegar a un acuerdo en la agenda de cada cual y, en definitiva, nos llevamos pequeñas decepciones hasta que llega la definitiva y nos separamos sólo para volver a comenzar con otra persona poco después.
 
El problema, explica Croydon, es que hemos sido criados en un “cuento de hadas” que no se corresponde con la realidad y que asegura que todos conoceremos a una persona que nos complete, y con la que compartiremos aficiones, creencias y la misma agenda social. Ya no sólo queremos sobrevivir, sino que esperamos que nuestra pareja nos llene completamente y atienda toda y cada una de nuestras necesidades.
 
Ya no sólo queremos sobrevivir, sino que esperamos que nuestra pareja nos haga felices “Me he preocupado por las obligaciones fiscales de las parejas convencionales durante toda mi vida adulta”, se lamenta Croydon. Fue ello lo que le condujo a investigar sobre la historia de las relaciones y lo que la ciencia había dicho sobre el tema, que parece ser, se encontraba en consonancia con su filosofía vital. Por ejemplo, el profesor Eli Finkel presentaba recientemente un artículo en el que hablaba de cómo el matrimonio siempre decepciona por las grandes expectativas que genera, por lo que conocer a otras personas y repartirse un poco podría mejorar la salud de nuestra relación “oficial”.
 
Los cinco jinetes del Apocalipsis marital
 
La fama precede a Croydon, autora del ya controvertido Sugar Daddy Diaries: Cuando una fantasía se convierte en una obsesión (Mainstream Publishing), en el que relataba la larga serie de aventuras amorosas que había mantenido con hombres mucho mayores (y más ricos) que ella. Aunque quizá esta no sea más que una de las innumerables muestras de cómo las relaciones modernas están cambiando nuestra manera de entender el amor. En un reciente artículo publicado en Metro, Croydon señalaba cuáles son las cinco tendencias más importantes que están surgiendo en el amor y en el sexo, y que dejan a la monogamia como un pacato reducto del pasado:
 
Flexisexuales
 
“Chicas que son chicos que quieren que los chicos sean chicas, que se lo montan con los chicos como si fuesen chicas y que se lo montan con las chicas como si fuesen chicos”, cantaban Blur en «Girls & Boys». Este trabalenguas podría servir para definir a los flexisexuales, una especie de bisexualidad en la que la exploración del sexo es esencial. Se trata de una especie de paso previo a las relaciones completamente abiertas, y su tendencia creciente viene demostrada por el significativo aumento del porcentaje de mujeres que han mantenido relaciones con personas de su mismo sexo en los últimos años.
 
Relaciones híbridas
 
También llamadas “mono/no-mono”, en ellas, uno de los miembros de la pareja se contenta con su monogamia mientras que el otro tiene la libertad para relacionarse con terceras personas. En muchos casos, la persona que permite que su pareja explore su deseo suele mostrar poco o ningún interés en el sexo, pero comprende las necesidades del otro.
 
Citas múltiples
 
O, como lo denomina Croydon, el equivalente a “pruebe antes de comprarlo”. Las redes sociales y las páginas de contactos han permitido que hoy en día cada vez más hombres y mujeres mantengan múltiples frentes abiertos tanto con el objetivo de divertirse como de elegir al candidato más apropiado para una relación a largo plazo.
 
Swingers pijos
 
Los clubes de intercambio de parejas han abandonado los locales oscuros para instalarse en los pisos más exclusivos de Nueva York o Londres. No se trata únicamente de treintañeros liberales, sino también, de aburridos cincuentones: Croydon relata la historia de una pareja que, después de que sus hijos abandonasen el hogar y dejasen el nido vacío, decidieron probar qué pasaba cuando se acostaban con otra persona.
 
Poliamor
 
Uno de nuestros temas preferidos. Como recuerda Croydon, no es sinónimo de acostarse con muchas personas, sino de amar a varias. “El amor no es un recurso finito”, piensan los que creen en el poliamor, por lo que no tiene por qué estar limitado a una única persona, aunque en algunos casos haya un “amor primario” y otros de menor jerarquía.

Como diría el presidente Mariano Rajoy, “it’s very difficult todo esto”.
El Confidencial

lunes, 17 de marzo de 2014

3º aniversario de mi Blog: Reflexiones desde mi sofá

Hoy se cumple el 3º Aniversario del blog. Como os dije en aniversarios anteriores, quiero agradeceros de nuevo a todos, los que me seguís hace tiempo y a los nuevos que se han incorporado durante este último año, el seguimiento que habéis hecho del mismo. Durante este año ha habido 54.502 entradas, que en total hacen 162.045, casi unas 150 entras al día en este último año.

Durante esta semana estuve ausente por cuestiones personales, pero seguiré publicando a partir de mañana nuevas entradas que espero que os gusten.

Estas son las páginas mas visitadas durante estos tres años:

EntradaPáginas vistas
7/3/2012, 2 comentarios
6.637
2/2/2012, 1 comentario
6.281
3/2/2012, 2 comentarios
4.891
7/2/2012, 1 comentario
4.238
3/9/2013, 1 comentario
4.127
 
Y ya para terminar os pongo las páginas leídas por países:


 

lunes, 10 de marzo de 2014

El alquiler

El mercado del alquiler está despegando en España. Cada vez más personas se deciden por esta alternativa ante la imposibilidad de comprar una vivienda o acceder a financiación. Sin embargo, la búsqueda de una casa acorde a sus necesidades o de la persona adecuada no es el único reto al que se enfrentarán inquilinos y caseros
Ya con el contrato firmado y las llaves en mano empieza el verdadero reto, la convivencia, esa delgada línea que para una buena o mala relación entre arrendadores. Para que la aventura del alquiler funcione para ambas partes, cada uno debe ser consciente y asumir los gastos derivados de su condición, circunstancia que no siempre queda clara y que provoca la mayoría de los enfrentamientos
Para que no haya dudas, la organización de consumidores y usuarios (OCU) ha creado una completa guía en la que se explica que gastos corresponden a uno y a otro. En primer lugar, la OCU recomienda leer bien el contrato de arrendamiento antes de firmar. “lo que ponga ahí es lo que cuenta”, recuerdan
Una vez ya formalizada la relación y, salvo que en el contrato de alquiler se diga lo contrario, los gastos se reparten de la siguiente manera:
- Casero: paga el IBI, la comunidad de vecinos, la tasa de basuras, el seguro de la casa y seguros de mantenimiento (caldera...)
- inquilino: paga todo lo que puede medirse con contadores individuales (el agua, la luz, el gas, el teléfono...)
En el caso de avería o desperfectos en la vivienda:
- Casero: paga las averías de la lavadora, la caldera, etc. Solo se libra de esto cuando es una avería mínima (un piloto, un filtro...) o si se demuestra que la culpa ha sido del inquilino
- Inquilino: paga los daños que él o sus visitas causen a la vivienda alquilada (por ejemplo: un cristal). Para estos imprevistos viene bien contratar un seguro especial para inquilinos. Se ocupa también de los pequeños gastos por el uso cotidiano del piso: cambiar una bombilla o la puerta de la lavadora, arreglar la cadena del baño o la correa de la persiana...
Además, en torno a las responsabilidades del alquiler pueden surgir todo tipo de cuestiones. La responsabilidad de algunas -como las denuncias por ruidos- está claramente atribuida, mientras que otras situaciones, como una inundación, la ‘culpa’ se puede repartir hasta en tres partes: inquilino, casero y comunidad de propietarios
Para evitar que la relación entre arrendadores y arrendatarios se enquiste, la OCU aconseja negociar sin pelear. Además, recomienda a los caseros contratar un buen seguro de hogar porque “así dormirán más tranquilos” y les recuerda que ser tacaños “puede salir muy caro”
En cuanto a los inquilinos, la organización de consumidores les explica que si el propietario ve que la mensualidad se paga puntualmente “será mucho más receptivo a la hora de negociar para que no tu alquiler no suba”